¿A poco no te ha pasado que llegas a casa después de un día largo y solo piensas en cenar algo rápido, pero sin sentirte pesado después? A todos nos pasa, y la buena noticia es que todavía podemos hacer cenas que sean calientes, ligeras y súper fáciles de preparar.
No se trata de complicarnos ni de vivir a dieta estricta, sino de elegir ingredientes que nos nutran y nos hagan sentir bien. Si nos organizamos un poquito y ponemos atención a lo que nuestro cuerpo necesita, podemos disfrutar de noches frescas con comidas reconfortantes, sin culpa y llenas de sabor.
Escoge por ingredientes frescos y nutritivos
A veces creemos que para cenar algo rápido tenemos que conformarnos con lo que haya en la despensa, pero la verdad es que elegir ingredientes frescos hace toda la diferencia. Piensa en verduras de temporada, proteínas magras como pollo o pescado, y granos integrales que nos den energía sin sentirnos pesados.
Incluso unos pocos ingredientes bien seleccionados pueden transformar cualquier receta rápida en una comida que nutra nuestro cuerpo y nos haga sentir bien. Algunos consejos prácticos:
- Prefiere verduras frescas o de temporada en tus recetas.
- Incluye una proteína magra en cada cena.
- Añade granos integrales como arroz o quinoa.
- Evita productos ultraprocesados siempre que sea posible.
- Mantén a la mano frutas y hierbas frescas para dar sabor.
Con estos pequeños cambios, cenar saludable se vuelve fácil y divertido, y además te compartimos 3 recetas ricas, sencillas y saludables para seguir disfrutando las noches de esta temporada del año.
- Sopa de calabaza y jengibre
- Ingredientes:
- 500 g de calabaza pelada y en cubos
- 1 zanahoria
- 1 cebolla pequeña
- 1 diente de ajo
- 1 cucharadita de jengibre rallado
- 600 ml de caldo de verduras
- Sal, pimienta y un toque de nuez moscada
- Preparación:
- Acitrona cebolla y ajo hasta que estén transparentes.
- Agrega calabaza, zanahoria y jengibre, cocina 5 minutos.
- Vierte el caldo, cocina 20 minutos o hasta que la calabaza esté tierna.
- Licúa hasta obtener una crema suave y sazona al gusto.
- Sopa de pollo con verduras
- Ingredientes:
- 200 g de pechuga de pollo en cubos
- 1 zanahoria
- 1 calabaza
- 1/2 cebolla
- 1 diente de ajo
- 1 litro de caldo de pollo bajo en sal
- Perejil fresco, sal y pimienta
- Preparación:
- Sofríe cebolla y ajo, añade el pollo hasta que se dore ligeramente.
- Incorpora las verduras y el caldo, cocina 15-20 minutos.
- Ajusta sazón y sirve con un poco de perejil fresco picado.
- Sopa de repollo y tomate
- Ingredientes:
- ½ cebolla blanca mediana, finamente picada
- 3 tomates finamente picados
- ½ cabeza de repollo, cortado en tiras delgadas
- 4 tazas de caldo de pollo
- 2 tazas de agua
- 8 ramitas de cilantro
- ¼ taza de cilantro fresco, finamente picado
- Sal al gusto
- Preparación:
- Acitrona la cebolla durante 3-5 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que esté transparente.
- Agrega los tomates y el repollo, y cocina 5 minutos más, revolviendo de vez en cuando.
- Añade el caldo de pollo, el agua y las ramitas de cilantro. Sazona con sal al gusto.
- Cuando empiece a hervir, tapa la cazuela y reduce a fuego lento. Cocina 15-18 minutos, o hasta que el repollo esté tierno.
- Sirve en tazones y decora con el cilantro fresco picado. ¡Listo para disfrutar!
Cenar ligero no significa sacrificar sabor ni calidez; estas sopas son perfectas para noches frescas de otoño, nutritivas y fáciles de preparar. Con pequeños cambios en tus cenas, puedes sentirte más ligero, con más energía y cuidando tu bienestar.
Si quieres un impulso extra para mejorar tus hábitos y alcanzar tus metas de salud de manera práctica, en Quitakilos te acompañamos paso a paso. Empieza hoy y descubre lo sencillo que es sentirte bien cada noche.
Pueden pasar los ingredientes con cantidades para una persona porfavor habemos personas sin la experiencia el cambios